miércoles, 21 de julio de 2010

Niño de la noche


Joe Sorren

Con énfasis de ovillo
se tiende en el portal de alguna esquina
y vano de esperanzas se amotina,
con ilusión de grillo;
en el hueco raído del bolsillo
le sangra el universo de una espina
y el hambre que lo inclina
lo sigue como un perro lazarillo.
Sin canciones de cuna,
la noche es un escándalo de frío
con ojeras de lágrimas y hambruna.
Ese niño también es algo mío,
lagrimón de rocío
que corre por la cara de la luna.

Niño del hambre

En la llaga del hambre, cada día,
navega sobre un témpano de hielo,
sin milagro de peces en el cielo
ni migajas de santa eucaristía;
penitencia de oscura artillería
en acecho tenaz de largo duelo,
dentellada de pulpa de pomelo
sobre su boca fría.
Impiadosa vigilia de los dientes,
voraces y abstinentes,
al desgarro de un peso de tormenta;
evangelio de llanto con que ayuna
y en rigores de hambruna,
con astillas de luna se alimenta.

Incluídos en Llevarás...

jueves, 1 de julio de 2010

Tu



Tu me pasas, ocurres, me sucedes,
legitimas en ti la maravilla,
surges de la manera más sencilla,
tiemblas, cedes;
desatas la atadura de las redes,
concedes la rompiente y la semilla,
te abalanzas de mar sobre la orilla,
derrumbas las paredes.
Modificas el curso del latido,
ensueño compartido
a salvo de egoísmos y de agravios;
aconteces, irrumpes, sobrevienes
y te obstinas de amor en los andenes,
con un beso de luz entre los labios.

Incluido en el libro Llevarás en la piel.