Crepuscular
pareces una virgen de Leonardo,
igual que un dios gallardo
que en aras del amor se desanuda;
alondra en castidad, espina aguda,
de toda la tristeza te resguardo,
del crepúsculo tardo
y de la duda.
Y te miro dormir, sencilla y bella,
lo mismo que una estrella
fabulosa
sujeta a los humores de Morfeo,
y creo,
así se dormirá la rosa.
Del libro De diluvios y andenes.
Pintura: El maestro Eduardo Urculo.