viernes, 9 de septiembre de 2016

Naufragio

Antigua soledad, tu boca sabe
los besos que le debes a mi boca
y en este desamor que nos convoca
hay que quemar la nave.
Cerrar el corazón con doble llave,
volverse cardo y roca,
que el tiempo del olvido que nos toca
destile sin dolor su pena grave.
Al son crepuscular de la tristeza
un pájaro de azul delicadeza
renacerá tal vez de los despojos.
Es hora del adiós, no habrá un mañana,
ni lluvia en el cristal de la ventana
ni un barco en el naufragio de tus ojos. ©

Del libro Oceanario.

9 comentarios:

Carlos dijo...

volverse cardo y roca...

Carlos dijo...

cuando te hablen de amor...

https://www.youtube.com/watch?v=w9TaCn7LuBs

María Bote dijo...

"Azar de la tristeza,
un pájaro de azul delicadeza"...

Unos versos impregnados de belleza, amigo POETA, Carlos. Enhorabuena y besos. Un placer volver a visitarte y leerte. besos. María.

Carlos dijo...

Hola María, tanto tiempo, siempre es grato verte pasar.

Me alegra que el poema te haya gustado.

Un beso grande.

Carlos dijo...

ni una lluvia detrás de la ventana...

Rembrandt dijo...

“…Es hora del adiós, no habrá un mañana,
ni una lluvia detrás de la ventana,
ni un barco en el naufragio de tus ojos.”

Si bien suena a tristeza profunda no impide ver la belleza de sus letras. Estimado Poeta otro hermoso soneto que guardaré en mi colección personal.
Lo beso.

REM


Habré de levantar la vasta vida
que aún ahora es tu espejo:
cada mañana habré de reconstruirla.
Desde que te alejaste,
cuántos lugares se han tornado vanos
y sin sentido, iguales
a luces en el día.
Tardes que fueron nicho de tu imagen,
músicas en que siempre me aguardabas,
palabras de aquel tiempo,
yo tendré que quebrarlas con mis manos.
¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un Sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva y despiadada?
Tu ausencia me rodea
como la cuerda a la garganta,
el mar al que se hunde.

JLB

unanotadiscordante dijo...

Hay barcos que incluso naufragan antes de hacerse a la mar...
Estupendo como siempre, Carlos ...
Un saludo

Carlos dijo...

Rem, veo que tu cajita de colección de poemas se va ampliando.

Hasta la tristeza de una despedida se puede contar con cierto vuelo de belleza. O por lo menos eso es lo que uno intenta.

La ausencia es una soga en la garganta.

Carlos dijo...

Hola Nota, tanto tiempo, me alegra saber que sigues pasando por Apenas.

Hay amores y barcos que a veces naufragan en la orilla.

Otro saludo para ti.