lunes, 6 de junio de 2016

Alguien muere de amor esta mañana

Alguien muere de amor esta mañana
en que los futurólogos del mundo
anuncian tempestades y borrascas
con severos discursos,
y se descubre el sol de otra galaxia,
al este de las lunas de Mercurio,
hundimientos de ríos y montañas,
revueltas y disturbios.
La bolsa de Berlín cotiza en alza
el espurio dinero de cien tipos
al borde de un océano de plata,
y en Guinea del Sur se muere un niño
que lleva en el umbral de la mirada
un hambre de hace siglos.

Del libro De diluvios y andenes.

12 comentarios:

Carlos dijo...

en Guinea del Sur... (y en tantas partes)

Carlos dijo...

hay un niño en la calle...

https://www.youtube.com/watch?v=kiiaIi79Fk8

Carlos dijo...

chiquilín dame un ramo de vos...

https://www.youtube.com/watch?v=2jqDOvhSfRQ

Carlos dijo...

un alma de color de olivo...

https://www.youtube.com/watch?v=YW-XQVP5mO4

Carlos dijo...

Niño de la luna


“No debe andar el mundo con el amor descalzo” (A. Tejada Gómez)

Con énfasis de ovillo
se tiende en el portal de alguna esquina
y vano de esperanzas se amotina
con el sello del hambre en el orillo,
en el hueco raído del bolsillo
le sangra el universo de una espina
y el miedo que lo inclina
lo sigue como un perro lazarillo;
sin canciones de cuna,
la noche es un escándalo de frío
y el alba una tristeza inoportuna;
ese niño también es algo mío
y no hay lumbre de luna
que vele su abandono de rocío.

Del libro De diluvios y andenes.

Carlos dijo...

Niño del hambre

“Tener hambre es la cosa primera que se aprende”. (Miguel Hernández)

En la llaga del hambre, cada día,
navega sobre un témpano de hielo,
sin milagro de peces en el cielo
ni migajas de blanca eucaristía;
penitencia de oscura artillería,
jirón de negro duelo,
dentellada de pulpa de pomelo
sobre su boca fría.
Impiadosa vigilia de los dientes,
voraces y abstinentes,
al peso diluvial de la tormenta,
evangelio de llanto con que ayuna
y en rigores de hambruna
con astillas de luna se alimenta.

Del libro De diluvios y andenes.

ANUSKA dijo...

Que maravilla Carlos y cuanta razon verdadera lleva,el dinero vale mas que la mirada de un niño hambriento,hasta ese grado de desumanizacion hemos llegado,una pena.

Alguien muere de amor esta mañana...

Besos ,que pases buena semana.

Rembrandt dijo...

“…y en Guinea del Sur se muere un niño
que lleva en el umbral de la mirada
un hambre de hace siglos.”

Hay momentos donde uno se queda sin palabras, la realidad es demasiado brutal para no hacerla un poco nuestra y su poema es un clamor ante tanta iniquidad.

Excelente Poeta, como siempre.

REM


Está muy bien hablar de Dios cuando se ha desayunado bien y se espera hacer un almuerzo todavía mejor; pero es imposible calentarse al sol de la presencia divina cuando millones de hambrientos llaman a tu puerta.

Mahatma Gandhi

María Bote dijo...

"La bolsa de Berlin cotiza en alza,
el espurio dinero de cien tipòs"

Bello y excelente, pero triste en su cruda realidad.

Felicidades y besos. María

Carlos dijo...

Gracias Ana, son tiempos difíciles en los que poco importa la situación de los más pobres mientras los impresentables de siempre se siguen llenando los bolsillos.

Un beso.

Carlos dijo...

Gracias Rem, no sé sin con un verso uno puede solucionar nada, creo que no, pero al menos dejar en claro de que lado del combate estamos.

Un beso.

Carlos dijo...

Triste María, si, muy triste, y lo pero que no tiene visos de poder solucionarse.

Mucha hipocresía, mucha palabra en vano y Dios mirando hacia otra parte.

Un beso.