martes, 27 de septiembre de 2016

Lejos

Y vamos otoñando de tristeza,
los dos en un planeta diferente,
tú, de verde fulgor, resplandeciente,
y yo que voy mudando la corteza.
La rosa decolora de firmeza
y el blanco del jazmín se vuelve ausente;
de noche soy un rio transparente
que surca el horizonte de tu pieza.
Cada vez más difusa y más lejana,
rubor que en la mañana
diluye en amarillo sus reflejos.
Nada queda de ti, doliente y poca,
dos besos en la boca
y otra lluvia, quizás, cayendo lejos. ©

Del libro Oceanario.

17 comentarios:

Carlos dijo...

Y otra lluvia, quizás...

tita dijo...

Que belleza Carlos,otoñando de tristeza,los dos en un planeta diferente,es fantastico,se merece todos los adjetivos que se puedan decir.

Me gustaria que lo recitaras algun dia.

Y una lluvia,quizas,cayendo lejos,me encanta este soneto,eres genial.

la imagen refleja perfectamente la tristeza,siempre encuentras la imagen perfecta.

Un beso ,dos tres,te los mereces.

Carlos dijo...

Muchas gracias Ana, hay amores que se van otoñando para terminar luego de marchitarse definitivamente. Otros, logran arañar la primavera y a veces logran florecer de nuevo.

Creo que lo tengo recitado, voy a ver si lo busco.

Fabián Pérez es un maestro en esto de lograr climas de melancolía a través de sus pinturas.

Sandra Montelpare dijo...

Buenas noches, Carlos.

De cómo se puede trabajar sobre una paleta de colores: verde, rosa, blanco, transparente, el otoño que siempre se me figura ocre, rubor, amarillo. Y decía trabajar sobre la paleta porque sobre ella se apoyan otras figuras: una construcción compleja tiene, por cierto. Antítesis que oscila de la firmeza, de lo resplandeciente, al diluirse y decolorarse, del fulgor a la transparencia, planeta y universo, las hojas y la corteza. Igual el último terceto es un estrujamiento: dos besos y una lluvia. Eso debe ser la ausencia, no? Muy logrado.
Tiene cierta cadencia lenta en el recitado o quizás sea que vamos otoñando.
Me llevo y sólo porque me gusta así sin más explicación que esa "de noche soy un río transparente / que cruza el universo de tu pieza".

Besos surcados por un río transparente. Es que estoy escuchando a Gilberto y Getz...

Van dijo...

Hay amores que "otoñan", lo bueno es que siempre otros florecen!

Otro beso!

Carlos dijo...

Si Sandra, dos besos y la lluvia, eso debe ser la ausencia.

Y no hay como el otoño para las despedidas. (aunque a mi me gusta el otoño)

Este soneto debería leerse con un subtexto debajo que dijese:

"Recitarse con el lado de la pena hacia arriba".

No todo en la vida debe explicarse ni tiene porqué tener razones lógicas, llévese lo que quiera.

Gilberto y Getz, tropicalismo y jazz, no sé porqué pero pienso en la garota de Vinicius.

Besos como fotos.

Carlos dijo...

Hola Van, es como dices, algunos se marchitan y otros invernan hasta la primavera.

Bendito el brote de lo verde.

Besos y besos.

Calma en días de tormenta (Darilea) dijo...

Que belleza de versos, en el presumido sentir de la tristeza.
Besitos

Carlos dijo...

Gracias Darilea, siempre es bueno verte.

Un beso.

Van dijo...

Si me dan a elegir, me quedo con los que inviernan ;)

Otro beso más!!

Carlos dijo...

El tema, Van, es que muchas veces los que eligen son los otros.

Y otro más. (a besuqueiro no me vas a ganar). :)

tita dijo...

Hola amigo,por aqui estoy pasando a dejarte un recuerdo y el haiku que sugiere el dia de hoy en mi ciudad.

Por la mañana
claros entre las nubes
y algunos charcos

Un beso.

Carlos dijo...

Hola amiga, :) gracias por tu paso y por el haiku, que es muy bello.

Beso beso.

Tita dijo...

Me maravilla este soneto,querido amigo.

A veces sí, hay amores que invernan en otoño y vuelven a resurgir en primavera,pero siempre con ese alo de tristeza.

Besos de otoño .

Carlos dijo...

Gracias Ana, a veces los amores otoñan sin posibilidad de resurgimiento alguno. (no siempre la primavera alcanza)

Besos crecidos de geranios.

Rembrandt dijo...

“Y vamos otoñando de tristeza,
los dos en un planeta diferente,
tú, de verde fulgor, resplandeciente,
y yo que voy mudando la corteza…..”

La lejanía a veces se parece al otoño, al invierno,
caen las hojas … se marchitan,
pero no mueren
luego transmutan y asoma la primavera,
nuevos brotes … flores.. aromas

Ser pacientes es la virtud de los que
saben que nada es para siempre,
tampoco la oscuridad ,
después de la noche viene el alba,
y con ella un nuevo día resplandece

Lo beso querido Carlos, muy cerca.

REM

Carlos dijo...

El otoño frugal se te parece,
hojas más, hojas menos...

Digo en un poema de hace mucho y si, tras el ocre siempre el verde renacerá.

Beso grande.