viernes, 11 de septiembre de 2020

La Lola

I

La Lola pena que pena
como un ramito de espuma,
cante de viento y de bruma,
rumbitas de luna llena.
Un beso de hierbabuena
desde su boca perfuma
y leve como una pluma
se desvanece en la arena.
Negra la tinta del pelo,
lo mismo que un dios en celo
desangelado y cautivo.
Por desnudarla en mi cama
se desangela y derrama
el corazón con que vivo. ©

II

Lola de nadie y tan mía
por esas noches de estío,
su boca en el beso mío
rompe las claras del día.
Voz de insurgente afonía,
rezo campal de rocío,
como las aguas de un río
con aire de bulería.
Lola de viento y hoguera,
puerto sin mar, hechicera
de celestial herejía.
Como una fruta madura
su boca de selva oscura. 
De nadie (nadie), y tan mía. ©

III

A palo seco, la Lola,
gitana como ninguna,
como ninguna tan sola, 
tan sola como la luna.
Rojo temblor de amapola,
morena piel de aceituna,
arrullo de caracola,
herencia de pena bruna.
La Lola, fruto y espina, 
rumor de fiesta taurina
que tiembla cuando me toca.
Zumo de almíbar su beso,
anochecido y espeso,
que se deshace en mi boca. ©

IV

La Lola que se deshoja
como un jazmín ofendido,
desconsolado latido,
herida que la despoja.
Luto de llanto y congoja
que le oscurece el vestido,
igual que un lazo tejido
con hilos de sangre roja.
La Lola, de cantaores,
rubia verbena de flores
de un recio cante gitano.
Azul temblor de rocío,
para abrigarla del frío
con el mantón de mi mano. ©

V

Lola de sombra y conjura,
asistencial alimento,
gajo de miel y tormento
como una fruta madura.
Sacramental quemadura
que atiza mi sentimiento,
con sus amores al viento,
paloma de boca oscura.
Pena de agraz desvarío,
contra la llaga del frío
se alce mi beso en hoguera.
Sirena de un mar lejano, 
que te sostenga mi mano,
para que nada te hiera. ©

Del libro Llevarás en la piel (Año 2000 y tanto) Recitado en el Café Monserrat - Tortoni - Radio UAI

5 comentarios:

Carlos dijo...

Hay varias Lolas perdidas en la maraña de este Blog. Algunas de a pares, otras de manera individual.

Rescato un comentario anónimo que me llegó en una de esas transcripciones:

"¡Qué bien escribes niño!... pero lo mejor es que estás para comerrrrte
¡quien te trincara!..."

Recuerdo que en su oportunidad me causó mucha gracia y lamenté que en la vida real no pasaran esas cosas, dando a conocer nombre y apellido. Todo sería mucho más fácil para nosotros, los integrantes del sexo débil.

Analicé "concienzudamente" los modismos del texto, las faltas de ortografía menores (minúsculas después de signos de admiración, algún acento extraviado) En fin, nunca supe quien fue.

En aquel momento dos cosas me desorientaban, lo de "niño", por cierto más español que argentino y el verbo "trincar", que si bien es cierto que nosotros lo usamos ocasionalmente, no es un término muy común. Tampoco sé si los españoles u otros países lo usan para referirse a la obvia intención que el término sugiere.

Cuestión que la antropófaga"l nunca dio la cara.

Como tengo el registro de que algunas de ustedes sigue pasando a leer, vuelve entonces la Lola para darle la "última"oportunidad a que se anime. jeje. ("los amores cobardes, no llegan a amores... Silvio)

Carlos dijo...

Valiente, Valiente, Valiente (los amantes del Círculo polar)

https://www.youtube.com/watch?v=Wpb67x_ocHE

Carlos dijo...

"Lágrimas negras" Bebo y el Cigala

https://www.youtube.com/watch?v=Bnc7Bz57CME

Carlos dijo...

Lo que fue,
ya pasó!
Y otra vez mi ser revivió
con un murmullo de caracola
y gracia española...
Lola,
Lola...
Lola, Lola, risas y mantón,
color verde laurel, sus ojos de pasión,
al pelo un gran clavel, ardiente y reventón
y más rojos que él, sus labios de amapola...
Lola, Lola, Lola bajo el sol,
hablando un mal francés y yo un mal español,
con vino de Jerez, perdimos el control
Y nunca más después,
he vuelto a verte Lola...

Charles Aznavour

Anónimo dijo...

"después de verte no podía dejar de temblar. Te quiero. Me conmovés tanto...

yo