miércoles, 28 de marzo de 2018

El último latido

Me duele más que a nadie Miguel entre las rejas,
flaquísimo de versos al pie de su agonía,
pastor de la palabra, cuidando sus ovejas
bajo la noche fría.
La luna se acomoda en medio de tus cejas
y tiene nombre propio el nombre de ese día,
ovillo de rencores que teje sus madejas
con negra cobardía.
Me duele como nunca la cárcel que te ciega
y niega
la promesa del verbo florecido.
Será tal vez al alba de un marzo destemplado,
el rojo de tu sangre, la muerte en el costado
y el último latido. ©


Del libro De diluvios y andenes.
Miguel Hernández: 30-10-1910 / 28-03-1942.

1 comentario:

Carlos dijo...

Eres la noche, esposa, la noche en el instante
mayor de su potencia lunar y femenina.
Eres la medianoche: la sombra culminante
donde culmina el sueño, donde el amor culmina.

Daré sobre tu cuerpo cuando la noche arroje
su avaricioso anhelo de imán y poderío.
Un astral sentimiento febril me sobrecoge,
incendia mi osamenta con un escalofrío.

Miguel Hernández.

https://www.youtube.com/watch?v=v30n949qnKM / Serrat